“Todas las funciones son vivas”
Andoni Ferreño lleva más de veinte años dedicándose al mundo de la interpretación. Ha presentado un gran número de programas en la pequeña pantalla, como “La Ruleta de la Fortuna” o “Telecupón”. Asimismo, ha actuado en varias películas y en series de televisión, como “La verdad de Laura” o “El Comisario”. En teatro, ha representado obras de autores como Enrique Jardiel Poncela, “Un marido de ida y vuelta”, o Miguel Mihura, “Maribel y la extraña familia”. Ahora, protagoniza junto a Ramón Langa la obra “Hay que deshacer la casa” en el Teatro Muñoz Seca, una representación dinámica que es diferente en cada sesión teatral. El actor de origen vasco también se ha encargado de adaptar y dirigir esta función, cuyo texto original, en versión femenina, pertenece a Sebastián Junyent.
La entrevista con Andoni Ferreño que podéis leer a continuación se produjo vía telefónica. Una charla en la que el actor se mostró cercano y amable a la hora de responder a las preguntas.
P: Comenzaste la carrera de Periodismo, ¿crees que tienen algo en común la profesión de actor y la de periodista?
R: No. Yo hice dos años de Periodismo por accidente, porque no me dejaron hacer Arte Dramático, cuando tenía esa edad. Una anécdota. Quería hacer Arte Dramático, pero no me dejaban porque era muy joven y había que venirse a Madrid. Así que hice Periodismo, pero dos años y creo que fui a la Facultad diez minutos (risas).
P: Te queríamos preguntar principalmente por “Hay que deshacer la casa”. En la obra original los personajes son femeninos, ¿qué se ha tenido que modificar en esta versión masculina?
R: Pues todo. Prácticamente todo. Es una historia que es contada por dos hermanos… No tiene nada que ver esta historia con la original, la esencia es la misma, pero la historia…
P: Es diferente, claro.
R: Son dos hermanos y en la otra eran dos hermanas, figúrate si cambia la cosa. Y en una, la infancia de ellas era en los años 50 y en la de estos es en los años 70, o sea que cambia muchísimo.
P: Tú has sido el encargado de adaptar la obra, ¿cómo se te ocurrió cambiarlo a los años 70?
R: Como tenía que ponerlo para mí, mi infancia fue en los años 70. La trasladé a esa época que me era más conocida y podía utilizar el lenguaje que se hacía en esa época. Entonces, bueno, me lo llevé a mi terreno. Si hubiera tenido sesenta años lo hubiera hecho de mi infancia en los años 50 o los años 60, pero lo tuve que trasladar a mi edad.
P: También eres el director de esta función ¿cómo ha sido esta incursión en el mundo de la dirección teatral?
R: Bueno, tampoco ha sido nada del otro mundo, al hacer yo la versión me dijeron que por qué no la dirigía también. Conocía muy bien la función, conocía la obra, contaba lo que yo quería que se contase. Otro lo hubiese hecho mejor, seguramente, pero bueno, simplemente la decidí dirigir y tampoco es nada del otro mundo, porque es una función que el texto original es muy bueno. Esto de dirigir, antiguamente todos los actores dirigían, tenían una compañía y dirigían sus funciones. Hasta que apareció la figura del director que cuando se bajó del escenario dijo, “ahora lo dirijo yo, pero no me subo”. Y dirigir si llevas en esto años y te han dirigido muchos y buenos directores pues tampoco es… Hombre, dirigir es complicado, pero cuando son dos actores y tienes la función bien clara… Lo más importante es que no se note la mano del director, que no se vea. Y luego arriba que sea muy normal, que sea muy cotidiano.
P: Esta idea de que fuera la versión masculina la empezaste a gestar con Sebastián Junyent. ¿Cómo surgió la idea de cambiarlo?
R: Por un simple comentario. Le dije que a mí me gustaría que esta historia la contaran dos hermanos y a él le pareció bien, pero bueno hace muchísimo tiempo, y dijo que algún día lo haríamos. Y cuando Sebastián falleció pues decidí hacerlo yo. Si veía que la cosa iba bien pues seguía escribiendo y si no lo dejaba. Cuando la terminé se la di a leer a gente, les gustaba mucho y seguí para adelante.
P: ¿Por qué decidiste retomarla?
R: Porque a mí me sigue pareciendo una función que es magnífica. Una función que todo el mundo debería ver y yo quería que la gente la viera. Decidí retomarla, hacer gira y entrar en Madrid con ella.
P: Después de cada función, ¿sueles comentas con tu compañero Ramón Langa, cómo os ha salido la interpretación?
R: Sí, sí claro. Comentamos siempre, “hoy hemos estado más flojos”, “hoy hemos estado mejor”, “hay una cosa nueva que ha surgido, vamos a decirla” o “vamos a quitar esto”… Todas las funciones son diferentes y todas las funciones son vivas, entonces siempre hay cosas que aparecen de nuevo. Si vemos que algo nos ha gustado pues lo añadimos y si vemos que no nos gusta lo quitamos.
P: “Hay que deshacer la casa” estará en el cartel del Teatro Muñoz Seca hasta el próximo 28 de septiembre, ¿hay posibilidad de prórroga?
R: No, no creo, no. No lo sé. Lo que haremos es seguir de gira y llegará un momento en que la función tocará fin. Y prepararemos otra. Volver a los escenarios con otra función.
P: ¿También dirigida por ti?
R: No, no, no. La dirección es algo que está ahí, si luego en otras circunstancias surge la posibilidad pues perfecto, la dirigiré… Pero de momento no tengo ninguna intención de dirigirla.
P: ¿Qué representa para ti el teatro frente a otros medios en los que también has trabajado como la televisión?
R: A mí me gustan todos. Me gusta el teatro, me gusta la televisión…El teatro es un modo más de desarrollar ese trabajo, de desarrollar la interpretación, cuando hacemos teatro. Lo que pasa es que es algo que todavía no se puede descargar por Internet y entonces es algo vivo. La gente ahora mismo quiere ver cosas en directo y quiere ver a los actores ahí. Y eso digamos que es un poco la madre de todo el cotarro este de la interpretación.
P: ¿Aprecias una mejora en la situación económica y cultural de nuestro país?
R: No lo sé. Hombre el teatro sobrevive y eso es importante, que la gente sigue yendo al teatro y eso es bueno. No acude la misma cantidad de gente que hace unos años, no era la misma crisis económica y, lógicamente, lo primero que se quita uno del bolsillo es el ocio. Pero la gente sigue yendo.
P: Cambiando un poco de tema, en una entrevista en esRadio comentaste que conocías a la familia de Miguel Ángel Blanco, ¿qué opinas de este cese de la violencia de ETA?
R: Puff, terrible (refiriéndose al uso de la violencia). Eso es… Sobre todo la gente que tenga un mínimo de sentido común y un aprecio por la vida no puede ni hablar sobre ese tema, sobre la violencia…Todo tipo de violencia tendría que estar erradicada, la de los yihadistas o los fanáticos, eso tendría que estar erradicado. La gente con dos dedos de frente no entiende la violencia.
P: Vais a estar con “Hay que deshacer la casa” hasta finales del mes de septiembre, luego has dicho que haríais una gira y en un futuro otra obra de teatro, pero ¿qué otros proyectos tienes a corto plazo?
R: De momento, esta función. Nosotros tenemos siempre muchos proyectos. Pero hasta que las cosas no se firman y no se empiezan a ensayar o a rodar, no tiene categoría ni de proyecto, se eleva a la categoría de comentario, “hay una película que me gustaría que hicieras”, “hay una serie”, “hay una obra de teatro”… Y hasta que eso se pone en marcha… Por eso los actores nunca hablamos de proyectos.
Periodista especializada en comunicación, cultura y gastronomía.