Unamos nuestras voces para luchar contra el cáncer
Dicen, como bien recordó Sofía Ellar el pasado sábado 22 de octubre en la gala benéfica de Cadena 100 Por Ellas, que la música cura el alma. Pero también ayuda a trasmitir con fuerza mensajes para poder salir adelante y es que, de esta, se sale. Así, de hecho, lo atestiguan los datos: más del 80% de las personas con cáncer de mama superan la enfermedad encontrándose entre los tumores con mayor porcentaje de salvación. Un diagnóstico temprano es clave para tener éxito en esta lucha y por ello es muy necesario concienciar y dar visibilidad, así como animar a las convalecientes a que no decaigan porque hay luz al final del camino. Bajo estas premisas este concierto solidario ha celebrado su décimo aniversario por todo lo alto en el Wizink Center de Madrid con lo mejor del panorama musical reivindicando como cada año el lema “No estás sola”.
Era mi primera vez cubriendo un gran concierto de estas características y desconocía un poco el procedimiento del photocall previo. Intuía que los grandes medios coparían los mejores lugares para hacer fotografías y que a los más pequeños nos dejarían marginados sin muchas oportunidades para poder cubrir el evento en condiciones. Pero finalmente no fue del todo así. Aunque por la organización sí que había unos cuantos que poseían una posición privilegiada en el espacio que ocupan las celebridades previo al evento, sin duda había un gran compañerismo entre los profesionales del sector que nos dejaban huecos todo el tiempo para que nosotros también pudiéramos realizar nuestro trabajo de forma satisfactoria, lo cual me trasmitió muchísima buena energía. Todos estábamos ahí trabajando por una buena causa y remando a favor de obra.
También pensé que entre los cantantes que formaban parte del cartel, habría diferencia de comportamiento entre los más famosos y los rostros menos conocidos, pero nuevamente me volví a equivocar. Me sorprendió gratamente descubrir que músicos de la talla de Ana Mena, Ana Torroja o Fangoria se mostraran muy amables con los periodistas, así como muy pacientes con los fotógrafos que reclamaban “mira aquí” o “una más” sin cesar. Además, respondieron a todas las preguntas de cualquier medio que les inquiriera, sin importar su peso dentro de la industria y siempre con una sonrisa de oreja a oreja en la cara. Así que con esas positivas sensaciones me encaminé a la pista para vivir la gran experiencia que fue el concierto de Cadena 100 Por Ellas.
El Wizink Center estaba a rebosar de gente y no es de extrañar porque se vendieron todas las entradas en tiempo récord: en menos de 48 horas ya no quedaba ninguna disponible. Aquí el que no corrió se quedó sin la suya, pero al menos todos aquellos que estuvieran en esta situación, así como los que no pudieran asistir por diversos motivos, tuvieron la oportunidad de disfrutar del espectáculo musical a través de la cadena de televisión Divinity que cubrió el evento. Todo por apoyar a las mujeres que atraviesan la enfermedad y subrayarles que no están solas en su guerra y que mantener una actitud proactiva es lo más importante.
El pistoletazo de salida lo dio el grupo murciano Funambulista con una canción muy alegre. “Me gusta la vida” trasmitió con su letra llena de grandes mensajes y su música animada mucha fuerza al público de la gala. Después fue el turno de Ainoa Buitrago quien con el single “Dispárame” mantuvo el nivel de buenas sensaciones dejado por el anterior artista. La sencillez de la compositora no impidió que se comiera el escenario como nadie.
De nuevo, otro murciano en la sala, el primer gran nombre del cartel saltaba al ruedo: Blas Cantó. El joven músico fue el primero en interpretar dos canciones, entre ellas, su tema más mítico usando el título para reivindicar la lucha contra la enfermedad: “¿Qué le decimos al cáncer?” preguntaba Blas, a lo que el público le respondía en medio de la melodía “Él no soy yo”. Sin duda, uno de los grandes momentos del evento.
Macaco fue el encargado de continuar con la gala interpretando su single “Lo quiero todo”, pero con el que de verdad hizo bailar a los asistentes del concierto fue gracias a la memorable “Con la mano levantá”. El artista es capaz de llenar el escenario con su guitarra en mano y su música pausada, pero con ritmo, al más puro estilo hawaiano y nos hizo viajar por unos instantes a esos veranos de relax en la playa. El músico dio paso a Marta Soto quien cambió el ambiente completamente al interpretar su tema “Mirar” con ese toque flamenco que tanto la caracteriza. Los pequeños problemas de sonido, que a veces dificultaban que se la escuchase con nitidez, no impidieron que la joven onubense se luciese demostrando el chorro de voz que posee ante la atenta mirada de un público entregado.
La siguiente en tomar las riendas fue Sofía Ellar quien decidió cantar con una capa rosa durante su animada “Canción de radio”. La cantante es todo un ejemplo a seguir de empoderamiento femenino al hacerse un hueco en el panorama musical sin una discográfica detrás y quiso trasladar un mensaje de fuerza y ánimo para todas las luchadoras contra la enfermedad.
Tras ella, otro plato fuerte: Maldita Nerea. El tercer artista murciano salió con fuerza al Wizink Center con su “No pide tanto idiota”. Pero, sin duda, la que más reclamo obtuvo fue una de sus canciones más emblemáticas: “El secreto de las tortugas”. A pesar de que este tema no posee una métrica fácil, y que hace ya unos cuantos años desde que vio la luz, muchos de los allí presentes recordaban gran parte de la letra, incluida yo, para mi propia sorpresa.
Era la hora de la esperadísima puesta en escena de la gran Ana Torroja, hacia quien había mucha expectación puesto que este año era la encargada de componer el tema principal del concierto Cadena 100 Por Ellas. El single “Pasos de Gigante” se interpretaba por primera vez en directo tras haberse presentado previamente unos días antes en la propia emisora de radio con una gran acogida. Y es que la letra del tema destila fuerza, valentía y ánimos por doquier, junto a una melodía pegadiza compuesta por el componente de Miss Caffeina, Alberto Jiménez. Tras el subidón del himno, la artista cantó “Sonrisa”, una de sus canciones más célebres en solitario, y a continuación dio la sorpresa cuando empezaron a sonar los acordes de “La fuerza del destino” que llenó el lugar de nostalgia ochentera.
Debo reconocer que, con permiso del resto de cantantes que lo dieron todo y no hay gran queja de ninguno de ellos, para mí el momento más estelar del concierto benéfico de Cadena 100 Por Ellas se produjo cuando la grandísima Ana Mena pisó el escenario. El carisma que destila la joven artista malagueña es palpable además de por su gran voz, sus letras pegadizas y sus ritmos intensos, por lo espectacularmente bien que baila, sin desafinar ni perder el equilibrio. Algo que no es tarea fácil al alcance de cualquiera.
Cuando empezó a sonar “A un paso de la luna” el público estalló de la emoción consiguiendo que cualquiera se pusiera de pie con ganas de menar el esqueleto. Y es que nadie se resistió a la potente puesta en escena de la cantante que animaba al público sin cesar. La energía no decayó con su “Música ligera” y llegó a su momento álgido de la noche con “Las 12”, una de las canciones del verano. Yo, que no era súper fan de la artista antes de vislumbrar su triple actuación, me quedé tan maravillada que al llegar a casa no dudé ni un instante en buscar próximos conciertos de la malagueña y no me extrañó ni un ápice comprobar que tenían colgados el cartel de entradas agotadas.
Antes de abandonar el escenario, Ana Mena realizó un dúo con el siguiente cantante en actuar: Abraham Mateo. Ambos son buenos amigos desde hace varios años e interpretaron la balada “Quiero decirte”. Tras este momento, ya sí, la de Estepona abandonó las tablas para que su compañero pudiera entonar en solitario el single “Ahora te puedes marchar” que devolvió el ambiente fiestero que había reinado en el recinto previo a la canción lenta. Con una estética retro, el joven artista sorprendió para bien al presentar una actuación original y diferente.
Y ya como colofón para cerrar el gran concierto de Cadena 100 Por Ellas pisó el escenario Fangoria, uno de los grupos más consagrados actualmente en activo del panorama musical. Alaska y Nacho Canut interpretaron las marchosas “Ni tu ni nadie” y “Dramas y comedias” que el público, conocedor de sus letras, tarareó al son de la música. Por último, decidieron terminar con “A quién le importa”, canción reivindicativa muy acorde con la temática de este concierto.
El único problema queenturbió el final del concierto fue el hecho deque el playback del grupo comenzó a fallar descubriéndose así el pastel de que la música que escuchábamos no era en vivo. Cosas del directo desde luego, pero que no hubieran pasado de haber interpretado la canción de verdad. Finalmente, Alaska intentó solventar el fallo técnico de sonido cantando, esta vez sí, parte del estribillo a capella, ante los vítores del público que le agradeció el detalle.
Anécdotas aparte, quiero dejar constancia de lo mucho que disfruté las más de dos horas del evento que me trasmitió mucha y muy buena energía. Creo además que acciones como esta son claves para visibilizar el cáncer de mama. Aunque es un tumor bastante conocido por el público en general, no somos conscientes de la gran lucha que hay detrás de estas valientes. Hagamos que todas se sientan arropadas y unamos nuestras voces una vez más para acompañarlas, tenderles la mano y que sepan que su vida sigue ahí fuera esperándolas a que se recuperen del todo para poder exprimirla al máximo.
Periodista multidisciplinar dedicada a contar historias con precisión y compromiso en el mundo del periodismo contemporáneo.